El cerebro tiene un sistema complejo no localizado en una única región que permite que el organismo se adapte a una situación estresante. Todos los seres vivos precisan de él para decidir rápidamente entre luchar o escapar ante un evento amenazador. Un choque o cruzar una calle donde el semáforo no funciona son situaciones de estrés donde el cuerpo se adapta para responder fisiológicamente. Ese estrés es un tipo de estrés agudo que puede durar dos minutos. Es el mismo estrés que utiliza una cebra para escapar de un depredador. El problema aflora cuando esas situaciones de tensión, como la presión continua de un jefe o la presión social por tener trabajo o el tránsito porteño, por ejemplo, se prolongan indefinidamente.
El problema en las sociedades actuales es que no nos adaptamos al estrés crónico, un fenómeno reciente. Estamos activando un sistema que no está preparado para eso. Sucede algo similar con los trastornos metabólicos: el cuerpo no está preparado para ingerir la cantidad de calorías que consumimos.
El Stress daña el cerebro
De todos modos, hay una interacción entre lo genético y lo ambiental. Dos personas que trabajan en la misma oficina, una al lado de la otra, con un mismo jefe pueden sufrir el estrés de distintas maneras. Además no solo el cerebro está involucrado, todas las células de nuestro cuerpo se "desgastan" de una manera diferente. Nuestras investigaciones indican que está muy clara la correlación entre estrés crónico y el desencadenamiento de síntomas depresivos, es por eso que se puede asegurar que el stress es uno de los principales causantes de las enfermedades psicosomáticas y autoinmunes.
¿Qué ocurre en el cerebro de una persona con estrés?
Primero se activan ciertos tipos de nervios en la periferia del cerebro y ciertas hormonas tienden a que el cuerpo se adapte a esa situación: que aumente la frecuencia cardíaca, que la sangre se redirija hacia los músculos y no al sistema gastrointestinal, o sea, el cuerpo se adapta a una situación de lucha o huida que uno puede imaginar en cualquier avenida de New York. Al mismo tiempo, hay un correlato conductual. Si queremos pelear vamos a necesitar una serie de “programas” de agresión tanto innatos como adquiridos que van a condicionar nuestra respuesta. Existe pues una conducta agresiva innata. Pero en nuestro caso está esculpida por la cultura, es decir una persona "pacífica" llegado el momento con stress puede volverse "agresiva".
Se libera una cantidad de hormonas llamadas glucocorticoides y de adrenalina que ejercen efectos sobre el sistema nervioso central y modulan conductas como la agresión, la huida, y que influyen en la memoria. Por eso ante un evento muy traumático muchas veces uno no recuerda lo que pasó, quién era el agresor, cómo era. La manera en que las neuronas modifican su capacidad de interconectarse, la sinapsis. Se sabe ahora que estas conexiones se modifican por la experiencia y a lo largo del desarrollo. Una de las hipótesis es que el estrés altera la función de la sinapsis o incluso la elimina definitivamente. Los mecanismos moleculares a través de los cuales esto ocurre son desconocidos. Precisamos conocerlos para desarrollar medicamentos más eficaces.
Es muy dificil salir del stress diario, cuanto más complicada y desarrollada es una sociedad más stress poseen sus habitantes. El hombre por ser un ser sociable y que se desarrolla en sociedad, aunque no lo quiera siempre experimentará stress en menor o mayor grado. desde el momento de ganar el baño por la mañana hasta una situación financiera insoportable, el hombre dañará sus neuronas. Lo que hay que hacer es desarrollar un autocontrol, paciencia y mucha convicción personal. la vida actual misma nos hace esclavos del sistema y convivimos con el stress. Tenemos que saber hacerlo...
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